Comentario Película Little Buddha

martes, 13 de abril de 2010
El film busca abrir un nuevo campo cultural para occidente, por medio de la filosofía y el estilo de vida de la religión Hindú. Esta base teológica gira en torno a Siddhartha, príncipe de los Brahmanes, que empieza a experimentar las dos caras de la vida.


Siendo príncipe, Siddhartha no conocía el dolor, la pobreza y la muerte. Pero el deseo de conocer el mundo lo lleva a dejar los objetos materiales para enfocar su vida a la búsqueda de la paz interna o nirvana.

Desde la postura filosófica y teológica de Siddhartha, se ha desarrollado una increíble corriente religiosa denominada Budismo.

Es así que la trama de la película se desarrolla en torno al conglomerado religioso Budista que busca la reencarnación de una deidad espiritual.

En busca de la reencarnación de esta deidad, una delegación de Budistas llega a la ciudad de Seatle para buscar a un muchacho que cumple el perfil de Lama Dorje

En este momento de la película, los padres del muchacho empiezan a ejercer el contrapeso ideológico entre oriente y occidente. A tal punto que les incomoda la presencia de su hijo en el grupo religioso.

Jesse, nombre del muchacho, tiene una afición oculta por el budismo. Por este motivo el pequeño buscaba vincularse a la congregación religiosa.

El final de la película muestra a tres pequeños (Jesse, Raju y Gita) que cumplían el perfil de reencarnación de la deidad. Ellos viajaron al Tíbet para someterse a una serie de pruebas en las que su conocimiento y destrezas los ubicarían como nuevos sucesores de la deidad que ha reencarnado en los tres muchachos.

Cuando el film muestra la muerte de Lama Norbu, se procede a crear un escenario en el que los pequeños fueron los principales actores ya que se les encomendó realizar una misión, dotados de un poco de ceniza del cadáver incinerado de Lama Norbu.

Gita, una muchacha oriunda de las regiones cercanas al Tíbet, arrojó las cenizas de Lama Norbu junto al árbol en el que Siddhartha había pasado su vida en meditación.

Raju, el pequeño muchacho dueño de un mono, dejo volar las cenizas del Lama.

Mientras que Jesse, el pequeño norteamericano, recibió de regalo de los budistas un cuenco, que era un recipiente de forma circular, semejante a un plato, para que lo utilice a su manera.

El muchacho, decidió utilizar el recipiente como el transportador de las cenizas del Lama, tal y como la tradición budista ha practicado. Las cenizas de Lama Norbu se fueron en la corriente del mar.


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